viernes, 24 de julio de 2015

Juguetes rotos


Shirley Temple dejó de creer en la Navidad el día que su madre la llevó a un centro comercial a ver a Papá Noel… y éste le pidió un autógrafo. Esta anécdota parece banal, pero es muy significativa, porque a los niños prodigio les hurtan el candor, les arrebatan la inocencia y los introducen en una espiral de consumismo, intereses y tiranías que les marcan de por vida.

La trayectoria de un niño actor no suele ser muy larga, aunque en principio nadie tenga dudas acerca de su talento interpretativo ante las cámaras. Lo que gusta de los niños actores es precisamente eso, que son niños. Criaturas de ojos grandes y mirada pura, de sonrisas sinceras a las que les faltan algunos dientes de leche, de bucles dorados, rostros pecosos y voces agudas que nos hacen sonreír. Hollywood se ha valido durante muchos años de estas jóvenes estrellas para hacer películas que fueron auténticos éxitos en taquilla, que dieron lugar a más películas, a anuncios publicitarios y a todo tipo de merchandising basándose en la cara y el nombre del niño del momento.

Sin embargo, a mí me parece que esos niños actores han perdido algo muy valioso. Han sido moldeados desde su más tierna infancia para adaptarse a los gustos de una moda determinada con el fin de agradar a un público hambriento de cine. Han madurado demasiado deprisa para poder integrarse en un mundo de adultos. Han de vivir con la eterna disfunción de haber visto, sabido y experimentado demasiado pronto. Son muy pocos los que han salido adelante sin apenas secuelas; otros han pagado con sus propias vidas el precio de la fama, convertidos en muñecos parlantes, en juguetes rotos que ya nadie quiere y que yacen en un rincón, olvidados.

En esta pequeña lista voy a hablaros de algunos actores que en su día fueron niños prodigio, auténticos bombazos en cartelera, dueños de obscenas cantidades de dinero que sus padres controlaron y, en ocasiones, dilapidaron. Niños que ya conocían el drama del alcoholismo y las drogas antes de cumplir los quince años. Como he dicho, algunos han conseguido salir adelante y labrarse una carrera más o menos exitosa. Otros, menos afortunados, se han perdido para siempre y no nos queda más que su recuerdo.




14) Brooke Shields




Aunque ahora es una estrella menor de la televisión, Brooke Shields fue una de las actrices adolescentes más famosas de Estados Unidos. Inició su carrera en el mundo del cine a los 11 años, cuando fue elegida para ser la protagonista de la película de Louis Malle La Pequeña, en la que interpretaba a una prostituta infantil. Sin embargo, el papel que la catapultó a la fama fue el de Emmeline en la película El Lago Azul, que la convirtió en un icono sexual en los 80 a la temprana edad de 14 años.

Lo que pocos saben es que la infancia de Brooke fue completamente tiranizada por su madre, Teri Shields. Desde los cinco años, Teri arrastró a la niña de casting en casting y la obligó a tomar clases de interpretación, ballet, piano e hípica. Todo para convertirla en una estrella, aunque Brooke no quisiera. Su exigencia y narcisismo habrían de calar muy hondo en la actriz. Cuando Brooke dio a luz a su hija, sufrió una terrible depresión postparto. Tuvo sentimientos suicidas y se vio incapaz de responder a las necesidades de la niña. No sentía nada por su hija, como si no fuera capaz de amar. Por fortuna, hoy en día ha superado ese trauma y tiene un moderado éxito como actriz en algunas series de televisión.



13) Jake Lloyd




Aunque ahora vive retirado de los focos y las cámaras, este actor llamó mucho la atención en su día cuando fue elegido a los 10 años para dar vida al jovencísimo Anakin Skywalker en la película de George Lucas Star Wars Episodio I: La Amenaza Fantasma. La película fue un sonoro fracaso y una gran decepción para los fans de la famosa franquicia, y gran parte de esa decepción recayó en la figura de Lloyd, a quien se acusó de no haber estado a la altura de su personaje.

El calvario de Jake Lloyd no tuvo nada que ver con el alcohol y las drogas, sino con el maltrato escolar. Debido a su repentina popularidad, el actor fue repetidamente acosado por sus compañeros de instituto, que se reían de él imitando el sonido del sable láser cada vez que le veían. Además, fue incapaz de aguantar la presión de soportar las obligaciones que requerían las promociones de las películas: viajes, entrevistas, etc. El propio Lloyd declaró que había llegado a conceder sesenta entrevistas en un día; demasiado para un niño tan pequeño. En un arranque de desesperación, destruyó todos sus recuerdos de Star Wars, y desde entonces se niega incluso a ver las películas porque para él es una experiencia muy desagradable.



12) Drew Barrymore




Aunque ya provenía de una prestigiosa familia de actores consagrados, la también actriz Drew Barrymore se hizo mundialmente famosa con sólo siete años por su papel de Gertie en la película E.T. el Extraterrestre, de Steven Spielberg. Sin embargo, no supo digerir bien la enorme fama que alcanzó y se desvió por el mal camino. A los nueve años empezó a beber y a los trece ya era una drogadicta incontrolable. Cayó en una espiral de drogas y alcohol que la llevó a intentar suicidarse.

Por fortuna, su entorno familiar supo protegerla de sí misma. Fue ingresada en una clínica de desintoxicación y consiguió salir adelante. A partir de los años 90, tuvo una nueva oportunidad en el mundo del cine y su filmografía empezó a mejorar. Son también los años en los que empieza a hacer actos benéficos y solidarios, llegando a convertirse en Embajadora contra el Hambre de las Naciones Unidas. Fue famoso su paso por el programa de Oprah Winfrey, a quien le entregó un millón de dólares para el Programa de Alimentos de la ONU. Hoy en día es actriz, fotógrafa y modelo de éxito, además de hacer vida sana.



11) Marisol




Nacida como Pepa Flores en 1948, fue descubierta a los 12 años por el productor cinematográfico Manuel J. Goyanes, quien le dio su nombre artístico y la convirtió en protagonista de películas de gran éxito como Un rayo de luz (1960), Ha llegado un ángel (1961) o Marisol rumbo a Río (1963). En muy poco tiempo, Marisol se convirtió en un auténtico ídolo de masas y llegó a protagonizar una película por año, por las que cobraba mucho dinero. Todas las niñas de la España del desarrollismo la adoraban y querían ser como ella.

Pero Marisol sufrió en sus propias carnes el precio de la ambición de Goyanes. Siendo niña, para que llorara en determinadas escenas, la amenazaban con que nunca volvería a ver a sus padres. Cuando creció y empezó a desarrollar, la obligaron a vendarse el pecho para ocultar sus curvas y que siguiera pareciendo una niña. La presionaron para casarse con el hijo de Manuel Goyanes, a quien en realidad no amaba y del que se separó al cabo de unos años. Tras una accidentada carrera con una filmografía cada vez menos destacable, se retiró del mundo del espectáculo y recuperó su nombre original.

Pepa Flores vive alejada de las cámaras. No quiere ni oír hablar de Marisol.



10) Haley Joel Osment




Haley Joel Osment es otro de tantos actores infantiles que se hizo famoso por su aparición en una película de enorme éxito. El gran papel de Osment fue el que hizo en El Sexto Sentido, interpretando a un niño que poseía la capacidad de ver y hablar con los muertos. Y, por si fuera poco compartir pantalla con Bruce Willis, el año anterior pudimos ver a Haley dando vida al pequeño hijo de Tom Hanks en la película Forrest Gump. Pero su carrera, en vez de despegar, se hundió cada vez más.

Las películas en las que participaba proporcionaron a Haley pingües beneficios, pero ahí estaba precisamente el problema: Demasiado dinero a una edad muy temprana. Además, sus películas empezaron a ser cada vez más flojas, lo que le llevó a perder popularidad. El alcohol y las drogas tampoco le ayudaron mucho. En el año 2006, cuando contaba dieciocho años, tuvo un accidente de coche por el que fue arrestado y condenado por conducir borracho y drogado. Además, también fue detenido por posesión ilegal de marihuana. Entró en una clínica de desintoxicación y actualmente intenta reconducir su carrera, aunque con escaso éxito.



9) Macaulay Culkin




La película Solo en Casa catapultó a Macaulay Culkin al estrellato a la temprana edad de diez años. Ya entonces se dijo que aquel niño rubio de mirada traviesa se había convertido en el producto infantil más rentable de Hollywood, y fue explotado a conciencia. La fama le permitió seguir en primera línea unos cuantos años más con la secuela de Solo en Casa, pero tras esa película su carrera y su vida empezaron a ir cuesta abajo.

El gran lastre de Macaulay Culkin fue su propia familia. Sus padres vieron a su hijo como la gallina de los huevos de oro y entablaron fuertes disputas que terminaron en un divorcio y en un continuo tira y afloja en los juzgados por la custodia (y el dinero) del niño. Macaulay se metió en el mundo de las drogas y no tardaron en venir los escándalos. Se casó a los diecisiete años y se divorció enseguida. Fue amigo íntimo de Michael Jackson y frecuentaba a menudo el rancho de Neverland. Ahora, lejos de las páginas de sucesos, intenta relanzar su carrera como actor.



8) Mary Kate y Ashley Olsen




Las gemelas Olsen son las actrices infantiles más jóvenes de esta lista, ya que empezaron a triunfar a la edad de nueve meses compartiendo el papel de Michelle Tanner en la serie Padres Forzosos, que fue un gran éxito a principios de los años 90. Su desparpajo ante las cámaras no desapareció al crecer, y hasta protagonizaron la serie Cosas de Gemelas, en la que actuaban con sus propios nombres. Sin embargo, pronto empezaron los problemas.

Antes de ir a la universidad, Mary Kate tuvo que ser ingresada en una clínica por problemas de anorexia. Ashley, más centrada que su hermana, decidió que la interpretación no era lo suyo y se decantó por el mundo de la moda. Pero Mary Kate siguió dando más problemas. Era una habitual de las fiestas, donde siempre era fotografiada borracha. Sus problemas con el alcohol y las drogas hicieron que más de una vez se desmayara en mitad de la calle. Por suerte, parece que ha conseguido rehabilitarse y ahora ambas hermanas dirigen un imperio de la moda que las ha convertido en millonarias.



7) Lindsay Lohan




Si comparamos la tierna imagen de las gemelas Haley y Annie de Tú a Londres y yo a California con cualquier fotografía actual de Lindsay Lohan, muchos dirían que no pueden ser la misma persona. La pequeña Lindsay, que consiguió encandilar a todo el mundo con su doble papel en el remake de 1998, no tardó en desviarse de su rumbo y lanzarse a una vorágine de sexo, drogas y alcohol.

En el año 2007 fue detenida por conducir borracha y puesta en libertad condicional. Entre otras lindezas, su historial delictivo nos habla de violencia en clubes nocturnos, coches destrozados, robo de joyas y obstaculización del trabajo de la Policía. Uno de sus cumpleaños fue patrocinado por una famosa marca de vodka, y hace poco la actriz confesó haber sufrido un aborto durante su adolescencia. Ha entrado y salido muchas veces de las clínicas de desintoxicación, pero su comportamiento no mejora. Tampoco ayudan las amistades que frecuenta, pues es habitual verla con Paris Hilton y Britney Spears, bien conocidas por su actitud poco seria.



6) Tatum O’Neal




Uno de los grandes momentos de la gala de los premios Oscar se dio en 1974, cuando una jovencísima Tatum O’Neal recibía el galardón a la Mejor Actriz de Reparto por su participación en la película Luna de Papel. Tenía diez años. Fue su primer papel en el cine, el que la catapultó a la fama… y el que habría de hacerla caer en el infierno pocos años después.

La infancia de Tatum O’Neal fue terrible. Fue víctima de abusos sexuales por parte de un amigo de la familia y también sufrió maltrato psicológico por parte de su padre. Con doce años, fue novia adolescente de Michael Jackson. En los años 80 empezó su flirteo con las drogas, hasta que se convirtió en una adicta a dichas sustancias. Su adicción la llevó a perder la custodia de los tres hijos que tuvo con su ex marido, el tenista John McEnroe, con quien se había casado en 1986. Su último escándalo fue en el año 2008, cuando fue detenida por intentar comprar cocaína en plena calle de Nueva York.



5) Brad Renfro




Al igual que otros actores de la lista, Brad Renfro fue una de esas estrellas cuyo debut a temprana edad se vio como el inicio de una prometedora carrera cinematográfica. Le vimos por primera vez en el año 1994 en la película El Cliente, donde compartía protagonismo con Susan Sarandon y Tommy Lee Jones. Fue un éxito inmediato. El Hollywood Reporter le premió como nuevo artista juvenil y fue nominado por la revista People como una de las personas más importantes de menos de treinta años.

Pero la historia volvió a repetirse, por desgracia para Renfro. La última parte de su carrera se vio interrumpida debido a su constante abuso de sustancias ilegales y otros problemas personales. En 1998 recibió cargos por posesión de cocaína y marihuana, y en 2005 fue arrestado durante una redada  contra traficantes de drogas. El propio Renfro admitió ante un detective que consumía heroína y metadona. En el juicio, fue declarado culpable y sentenciado a tres años de reclusión en un centro de rehabilitación. Pero ningún tratamiento fue efectivo con él. Brad Renfro fue hallado muerto en su apartamento en el año 2008 de una sobredosis de heroína y morfina.



4) Jonathan Brandis




Jonathan Brandis comenzó su carrera como actor infantil en los años 80, pero fue en los 90 cuando alcanzó una gran popularidad por su papel en la serie SeaQuest DSV. Su atractivo rostro, su pelo rubio y sus llamativos ojos azules le convirtieron en un ídolo adolescente muy famoso.

Brandis debutó a los 6 años en el culebrón One Life to Live. Cinco años después, hizo una aparición en Atracción Fatal, y también fue actor invitado en otras series muy conocidas en la época. A los 14 años fue elegido para interpretar a Bastian en la segunda parte de La Historia Interminable. Ese mismo año consiguió el papel de Bill Denbrough en la miniserie It. Sin embargo, a partir de entonces, sus papeles empezaron a ser cada vez más mediocres, y eso cuando le surgía una oportunidad laboral. Todo eso le llevó a caer en una depresión que le condujo posteriormente al suicidio. El 11 de noviembre de 2003, un amigo llamó a la Policía informando de que Brandis se había ahorcado en su casa. Tenía 23 años.



3) River Phoenix




Al igual que Drew Barrymore, River Phoenix procedía de una familia que se dedicaba al mundo del cine. De hecho, los cinco hermanos Phoenix probaron suerte como en el mundo de la interpretación, aunque River fue el que más salió perdiendo. Se hizo mundialmente famoso por su papel del joven Indiana Jones en la película Indiana Jones y la Última Cruzada. Por entonces, tenía 19 años. Era muy guapo, llevaba una carrera más que aceptable, era un gran guitarrista y hasta se había labrado una reputación como defensor de los derechos de los animales.

Esta prometedora carrera se truncó abruptamente en 1993. River tenía programada una actuación con su grupo en el pub The Viper Room, propiedad del también actor Johnny Depp. Una mezcla letal de drogas que consumió entre canción y canción le provocó un shock, convulsiones y vómitos. Murió en plena calle de Hollywood, a la vista de su propio hermano y de cientos de personas, sin que los servicios médicos pudieran hacer nada por él.



2) Natalie Wood




La guapísima y talentosa Natalie Wood parecía destinada a convertirse en una nueva Shirley Temple cuando a los cinco años se convirtió en una estrella infantil con su aparición en la película Happy Land (1943). Pero, al contrario que Shirley Temple, Natalie Wood fue capaz de superar el cambio hacia otro tipo de papeles. En su haber se cuentan títulos como Rebelde sin causa, Centauros del desierto, West Side Story y Esplendor en la hierba, en las que encarnaba a personajes vulnerables. Más adelante, demostraría su capacidad para interpretar a personajes con impulsos y deseos sexuales complejos.

Lo tenía todo, pero eso se acabó a los 43 años. En 1981, Natalie Wood fue hallada muerta ahogada en circunstancias que todavía hoy siguen siendo un misterio. Al parecer, estaba celebrando una fiesta privada en su yate, fondeado en la bahía de Los Ángeles, cuando cayó al agua y se ahogó. No se sabe si se cayó del yate a consecuencia del alcohol y las drogas, o si fue empujada a propósito, e incluso se ha especulado la opción del suicidio.



1) Judy Garland




Judy Garland debutó muy pronto en el mundo del espectáculo. A los 30 meses de edad, actuaba con sus hermanas en un grupo de vodevil con el que recorrieron Estados Unidos entre 1927 y 1935. Su carrera cinematográfica empezó, sin embargo, cuando tenía 16 años, encarnando a la inolvidable Dorothy en El Mago de Oz (1939), película que la haría famosa y por la que ganó un Oscar especial.


Sin embargo, la película que le dio la fama también habría de ser la que la marcara para el resto de su vida. Durante el rodaje, como era demasiado mayor para hacer de Dorothy, fue obligada a llevar un corsé faja para disimular sus pechos y que diera la impresión de seguir siendo una niña. A partir de entonces, la actriz empezó a vivir demasiado intensamente. Se casó con el director Vincente Minnelli, de cuyo matrimonio saldría otra grande de la escena y la música, Liza Minnelli. Judy Garland nunca cayó en el olvido, pero entró en una dinámica de drogas y alcohol que acabó con ella. Fue hallada muerta de una sobredosis en los retretes públicos de una estación. Sólo tenía 47 años.


2 comentarios:

  1. Qué pena me ha dado esta entrada. Me ha hecho preguntarme qué demonios fue lo que pasó en la vida de estos niños para que prácticamente todos ellos se dieran al alcohol y a las drogas. ¿Abusos traumáticos? ¿Estrés insoportable? ¿O lo hicieron simplemente porque todo el mundo a su alrededor lo hacía?
    Sea como sea, creo que la falta de supervisión y control y la codicia de sus padres tendría mucho que ver en este asunto. Algunos casos son pura mala suerte (como el del pobre Jake Lloyd, que me da muchísima pena), pero los demás creo que podrían haberse evitado con un estricto control parental.

    Como ejemplo de esto que te digo del control parental, tenemos a una de las pocas niñas actrices que no tuvo ningún problema de este estilo: Natalie Portman, que debutó a los 11 años y cuyos padres supervisaban estrictamente los rodajes, los guiones, y establecían lo que la niña podía o no podía hacer. Rechazaban todas las películas donde el personaje de su hija menor de edad tuviera que desnudarse, fuera demasiado siniestro, o el rodaje no pudiera ser en vacaciones e interfiriera con sus estudios. Hay anécdotas sobre ellos que me encantan, como cuando en la película "A cualquier otro lugar" se negaron a que Natalie apareciera desnuda con 17 años (y cuando el director amenazó con sustituirla, Susan Sarandon, la protagonista, se cabreó y dijo que si Portman se iba, ella también), o como cuando no dejaron acudir a Natalie al estreno de "La Amenaza Fantasma" porque estaba de exámenes y tenía que estudiar.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues lo que probablemente ha pasado es que la mayoría se han encontrado con un entorno que no los ha visto como los niños que eran y los han convertido en monigotes al servicio del público. Lo que yo no concibo es por qué sus padres no hicieron algo para proteger a sus hijos de la jungla que es Hollywood. A ver, no es un secreto para nadie que Hollywood no es un monasterio benedictino; ahí pasa de todo y es necesario proteger a los niños actores para no dañar su inocencia. A mí personalmente no me importa que los niños trabajen como actores, pero siempre desde un estricto control paterno, como dices tú. Los padres deben ser conscientes en todo momento de lo que se le está pidiendo al niño y son ellos los que tienen que considerar si es adecuado para él o no.

      Por fortuna, no todos los niños actores han acabado mal. Natalie Portman (una de mis actrices favoritas, por cierto) tuvo la suerte de tener unos padres que se preocupaban por ella pero que a la vez le permitieron cumplir su sueño de ser actriz, lo que demuestra que ambas cosas no son incompatibles. Otros actores como Jennifer Connelly, Scarlett Johanson o Leonardo DiCaprio también empezaron sus carreras cinematográficas desde muy jóvenes y conseguido salir adelante.

      Eliminar