sábado, 16 de febrero de 2013

Una de mis idas de olla: El Diario de Daenerys

¡Hola a todos!

Hoy he decidido traeros algo que he hecho yo, producto de mi mente creativa y ociosa (me temo que más ociosa que creativa T_T) y que tiene como único objetivo divertir al personal, sobre todo a los fans de Juego de Tronos.  Un buen día, se me ocurrió que las cosas que pasan en todo Canción de Hielo y Fuego darían mucho juego en programas basura como el desaparecido Diario de Patricia: que si incestos, que si muertes macabras, que si disputas por tierras, que si guerras absurdas, que si amores imposibles... Entonces me dije: ¿Y por qué no hacer un Diario a lo Juego de Tronos?

Y aquí está.

Todavía no he acabado la segunda parte, pero las voy a ir espaciando para que podáis divertiros leyéndolas. Cada programa contaría con cuatro casos (voy por el segundo de la segunda parte), pero los voy a colgar de uno en uno. Aviso que los casos que salen tienen poco o nada que ver con la historia original de Canción de Hielo y Fuego; es decir, que no hago SPOILERS (bueno, puede que alguno)*. Se juntan personajes vivos con muertos, hay otras enemistades que las de las novelas, los personajes no son lo que parecen... pero espero que os resulte divertido. Es puro afán lúdico.

*En este episodio de El Diario de Daenerys se hace un spoiler de Juego de Tronos, así que absténganse los que no han leído la primera novela.

Nada más, y leed el programa de.... ¡¡¡El Diario de Daenerys!!!



Estamos en un plató de televisión en Desembarco del Rey (por aquel entonces sí que existía la televisión, lo que pasa es que no estaba tan de moda) que muestra una hilera de asientos y butacas que están libres. Un público selecto de posaderos, contrabandistas, caballeros y prostitutas aplaude enardecido en cuanto se abren las puertas y aparece Daenerys Targaryen, la presentadora del programa.

Dae: ¡Buenas tardes a todos y bienvenidos al Diario de Daenerys! Son las siete de la tarde, una hora menos en las Islas del Verano. Nuestro programa de hoy trae casos sorprendentes, familias destrozadas por las circunstancias y testimonios desgarradores que harán que más de uno se deshidrate de tanto llorar. ¡Empezamos!

Musiquita de saxofón y aplausos del público.

Dae: Nuestro primer invitado ha vuelto a nuestro programa para conocer el desenlace de su historia. Hace una semana conocimos a Joffrey, que vino a contarnos las sospechas que tenía acerca de quién era su verdadero padre. Hoy no viene solo y pronto sabrá toda la verdad. ¡Un fuerte aplauso para Joffrey Baratheon!

Otra vez la música y los aplausos. Joffrey viene por el pasillo con un polo Lacoste rojo, unos pantalones de pijo y unas gafas de sol en la cabeza.

Dae: Buenas tardes, Joffrey. Bienvenido de nuevo al programa.

Joff: Muchas gracias.

Dae: Joffrey, tú viniste la semana pasada a contarnos tu historia. Desde hace años albergas la sospecha de que tu padre… no es realmente tu padre.

Joff: Así es.

Dae: Cuéntanos un poco más tu historia. ¿Qué dijo Robert, tu supuesto padre, cuando terminó el programa y pudisteis hablar a solas?

Joff: Me dijo que no se lo podía creer, que era una sospecha totalmente infundada. Dice que está claro que soy su hijo, aunque no sé en qué se basa para decirlo porque no nos parecemos en nada.

Dae: Ponnos un ejemplo.

Joff: Bueno, para empezar yo soy rubio natural y él es moreno. Yo tengo los ojos verdes y mi padre los tiene azules. Él está más gordo que una albóndiga, ha heredado todos los pelos de la familia Baratheon y, para completar el cuadro siniestro, viste fatal. Todo lo contrario que yo, como podéis ver. (Sonrisa pensada para impactar. Las chicas del público gritan histéricas)

Dae: Sí, ya vemos que tienes muy buen aspecto. ¿Y qué dice tu madre de todo esto?

Joff: ¿Que qué dice mi madre? Uf, está súper flipada. Según ella, no tengo ningún motivo para pensar que tengo otro padre.

Dae: Tienes dos hermanos más, ¿verdad?

Joff: Sí, menores que yo. Ahora que lo pienso, a lo mejor Tommen sí que es hijo de mi padre porque está tan gordo como él.

Dae: Bueno, no empecemos a faltar al respeto a personas que no pueden defenderse.

Joff: Vale, perdón. Es que estoy muy nervioso.

Dae: Volviendo al tema, ¿tienes alguna sospecha acerca de quién puede ser tu verdadero padre? ¿Algún amigo de la familia, un vecino o algo así?

Joff: La verdad es que podrían ser varios, porque esto de ser príncipe lo que tiene es que siempre hay mucha gente a tu alrededor. Y con esto no quiero decir que crea que mi madre se va con cualquiera, ¿vale? O sea, esto para mí es muy fuerte. Pero es que por ahí hay rumores que, quieras o no, te influyen un poco.

Dae: ¿Quién te cuenta esos rumores?

Joff: Son cosas que oyes por ahí, frases sueltas. Varys me dijo una vez que mi padre tenía más cuernos que un saco de caracoles. Y mi tío Tyrion me ha dejado caer más de una vez que a mi madre le tira más el león que el ciervo. Yo ya no sé cómo debo tomarme esas cosas, la verdad.

Dae: Bueno, Joff. Hoy sabrás toda la verdad. La semana pasada has venido con tus padres y has pedido que se te hiciese una prueba de paternidad. En este sobre está el resultado, pero antes de leerlo vamos a darles la bienvenida a tus padres, ¿te parece bien?

Joff: O sea, pues claro.

Dae: ¡Pues que entren Robert Baratheon y Cersei Lannister!

Música ambiental. Por el pasillo viene la pareja más extraña del mundo. Robert, grande y gordo, viene vestido con la ropa que sobró de Bonanza. Cersei lleva un vestido rojo con un escote hasta el ombligo, maquillada a más no poder y con un montón de collares. En cuanto entran, Robert tira besos a las chicas guapas del público y también a Daenerys. Cersei le lanza una mirada fulminante y se sienta al lado de su hijo.

Dae: Robert, Cersei… muchas gracias por venir esta tarde al Diario de Daenerys.

Rob: De nada, rubia. Un placer. ¡Estás más buena en persona que por la tele!

Dae: Ji, ji, ji… Gracias… (Daenerys no sabe para dónde mirar) Bueno, vamos a centrarnos. ¿Cómo has pasado esta última semana, Robert?

Rob: Pues regular, ya que lo preguntas. ¿Tú cómo te sentirías si tu hijo, que es lo más maravilloso que te ha pasado en la vida, de repente te dice que cree que no eres su padre? Los rumores aumentan todos los días, poniéndome como un trapo a mí y a mi familia. ¿Dónde deja eso a mi mujer, que es una santa y no tiene ninguna culpa?

Cersei mira para otro lado.

Dae: Lo comprendo, es un golpe para todos vosotros. Pero debes entender que Joffrey lo está pasando muy mal con todo esto. ¿Tú que opinas, Cersei? ¿No crees que tu hijo merece que se le diga la verdad para quitarle esas dudas de la cabeza?

Cer: Yo ya no sé qué pensar de este niño, Patricia.

Dae: Daenerys.

Cer: Eso, perdona. Es que Joffrey siempre ha sido un cabeza dura. Mira que siempre le he dicho que Robert es su padre, pero no hay manera de hacérselo entender.

Dae: No os preocupéis, porque la verdad definitiva está escrita en este sobre que nos han enviado los Laboratorios de Rocadragón, que han analizado vuestras muestras de ADN.

Cer: ¿La verdad definitiva…?

Dae: Sí.

Cer: ¿Y no podrían estar equivocados?

Dae: Son pruebas de ADN. El margen de error es de uno entre un billón.

Cer: Pero podrían equivocarse. No es una prueba fiable.

Joff: Mamá, te noto tensa. ¿Te pasa algo?

Cer: ¿Tensa, yo? ¡Para nada!

Rob: Tu madre nunca está tensa. ¿Estás tensa, cielo?

Dae: ¿Te encuentras mal, Cersei? Podemos traerte un vaso de agua.

Cer: No, gracias, estoy bien…

Dae: En fin, como quieras. (Abre el sobre y lee) “Los Laboratorios Rocadragón, después de realizar los estudios y pruebas pertinentes tras extraer las muestras de ADN de Robert y Joffrey Baratheon, afirman sin posibilidad de error que Robert Baratheon…

Silencio sepulcral en el plató. Todos los presentes se echan hacia delante, expectantes. La música adquiere un tono de tensión que se agudiza con el sonido de un corazón palpitando.

Dae: …………….. ¡No es el padre biológico!”

Joff: ¡Jopeta, no! ¡Lo sabía!

Cer: ¡Eso es mentira! ¡Exijo una segunda opinión!

Rob: ¿¡Qué!? ¿¡Pero qué coño…!? ¡¡Mecagüenlaputa, Cersei!! ¿¡Se puede saber de qué cojones va todo esto!?

Cer: Puedo explicarlo…

Joff: Papi…

Rob: ¡A mí no me llames papi, bastardo! ¡Tú no eres mi hijo!

Joff: ¡Noooo!

Cer: ¡No le hables así al niño! ¡Es muy sensible!

Rob: Sí, lo habrá sacado de su verdadero padre porque yo no tengo esa sensibilidad.

Cer: ¡Eres un zoquete deslenguado!

Rob: ¡Y tú eres una zorra!

Cer: ¡Putero!

Rob: ¡Guarra!

Acortamos un poco la escena por el alto contenido en violencia y palabras malsonantes que viene a continuación. A estas horas de la tarde hay muchos niños viendo la tele en los Siete Reinos y no es cuestión de fomentar actitudes que pudieran influir negativamente en su educación.

Dae: Vaya… Una terrible revelación, sin duda. ¿Cómo te sientes, Robert?

Rob: Para serte sincero, Daenerys, estoy muy sorprendido. Nunca pensé que mi mujer fuera capaz de ponerme los cuernos.

Cer: ¡Pero si tú me la pegas con cada golfa que se cruza en el camino!

Rob: ¡Esas no son cosas para venir a hablarlas en la tele!

Cer: ¡Quiero el divorcio!

Rob: ¡Y una mierda! No pienso pasarte una pensión ni a ti ni a este bastardo hijo tuyo.

Joff: ¡Papá, no podéis divorciaros!

Rob: Que se case con tu verdadero padre, ya que tanto le gusta.

Dae: Puede que lo haga, Robert. Y tenemos otra sorpresa más para vosotros, porque aquí está… ¡El verdadero padre de Joffrey! ¡Un aplauso para él!

Retumban los aplausos mientras suena la música I’m too sexy. En cuanto entra el invitado, las chicas vuelven a gritar enloquecidas.

Rob: ¡No me jodas! ¡Jaime Lannister!

Jai: ¡Buenas tardes, Desembarco! (Jaime viene de punta en blanco, pasa de largo a Robert Baratheon y a Joffrey y se sienta junto a Cersei, a la que le entrega un ramo de rosas. Cersei, con una risa tonta, le hace cucamonas a su hermano mellizo)

Rob: ¡Esto es increíble!

Joff: ¿Tito Jaime es mi padre? ¡Pero mamá…!

Cer: Calla, niño. Tú no lo entiendes.

Dae: Jaime, sé bienvenido al programa. Según nos has dicho en una entrevista anterior, tú sabías que Joffrey no era hijo de tu cuñado.

Jai: Sí, debo admitirlo.

Dae: La semana pasada, Joffrey nos ha contado que tú fuiste el primero al que acudió con sus sospechas. ¿Y a pesar del trauma por el que el chico estaba pasando, no fuiste capaz de contarle la verdad?

Jaime se frota las sienes. Es evidente que esta situación le viene grande.

Jai: Esto es muy fuerte… Verás, se supone que Joffrey no tendría que haberse enterado aún. Cersei y yo acordamos que le diríamos la verdad cuando cumpliese los dieciocho años. Queríamos decirle que su nacimiento no estaba planeado, pero que le queríamos igual…

Cer: ¿Que no estaba planeado? ¡Si me hiciste dos hijos más!

Joffrey da un grito, horrorizado.

Joff: ¿¡Mis hermanos también son hijos del tito Jaime!?

Rob: ¡Toma ya! ¡Para que luego digan de mí!

Jai: ¡Joff, tú no lo entiendes! ¡Lo hicimos por tu propio bien!

Joff: ¡O sea, no me lo puedo creer! ¡Qué súper fuerte!

Jai: Te juro, Joffrey, que puedo ser un buen padre para ti. Si me das una oportunidad, te lo demostraré.

Robert, que hasta ahora ha mantenido el tipo bastante bien, no puede más y se pone de pie, rojo de cólera.

Rob: ¡Tú no vas a demostrar nada, cabrón!

Robert le arrea un puñetazo a Jaime en todo el ojo y acto seguido empiezan a llover hostias. El censor nos ha pedido que cortemos esta parte por ser demasiado zafia y violenta, pero el productor del programa ha pensado que si la ponemos podría subir la audiencia.

Rob: ¡Hijoputa! ¡Mariquita!

Jai: ¡Eso lo serás tú, cornudo!

Vuelven a caer hostias. Joffrey está alucinado, mientras que Cersei se lima las uñas tranquilamente. Daenerys, desesperada, intenta poner un poco de orden.

Dae: ¡Bueno, basta ya! ¡Robert, Jaime! ¡Este espectáculo es lamentable!

Rob: ¡Tú calla y sigue con el programa! ¡Toma esta, capullo!

Jai: ¡Ay, mis cojones! ¡Te voy a poner el culo de joroba, mamón!

Daenerys suspira y pasa la tarjeta que tiene en la mano. El programa debe continuar y, como es una profesional, sigue adelante sin inmutarse.

Dae: Bueno, nosotros tenemos que seguir… Mientras esos dos imbéciles se parten el espinazo, presentaré a nuestro próximo invitado. Se define como un chico valiente y leal que siempre hace lo correcto. Es algo que ha aprendido de su padre, al que tiene que preguntarle algo muy importante. ¡Recibamos con un gran aplauso a Jon Nieve!


(Pero eso será la próxima vez)



Hasta la próxima!!

2 comentarios:

  1. XDDDDD

    ¡Diooos! ¡Es buenísimo! ¡EXIJO una segunda entrega!

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  2. Paciencia, paciencia!

    Prometo ir subiendo poco a poco, jajajaja!!
    En el segundo "programa" hasta tengo cómo se conocieron Sansa y Sandor Clegane; y hasta ahí puedo leer.

    Besos!!

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